No es para celebrar!!!

En el año que pasó Cali tuvo una reducción en las cifras de homicidio. Sin embargo, este balance no debería ser para celebrar porque la violencia sigue rondando. Ante los estragos que le ha causado la violencia, la sociedad caleña ya no puede contentarse con la disminución del número de personas asesinadas, así se logren resultados como los del último semestre. Y mientras la ciudadanía no asuma el respeto a la vida como valor absoluto, la gran labor que realizan las autoridades municipales y de la Policía Metropolitana seguirá opacada por tenebrosos índices. Por ello, los caleños deben entender que la fuerza pública y la represión no serán suficientes para impedir que la intolerancia siga acabando con vidas humanas en su ciudad. La colaboración de todos en la construcción de una cultura ciudadana basada en el respeto a la vida, es el paso que Cali debe dar si quiere tener motivos de celebración.

Enero 04 de 2008

http://www.elpais.com.co/historico/ene042008/OPN/molino.html

comentario

Estoy totalmente de acuerdo lo que el autor de este texto plantea, pues aunque el número de homicidios se haya reducido, la intolerancia sigue afectando cada vez con más fuerzas a las personas que viven en Cali y mientras este problema no se solucione, la violencia no se va a acabar.